El viernes se cumplió la semana de 5 días programada para este año en Sierra Nevada. Con Rafa siempre en la habitación, Fer y yo nos dedicamos a aprovechar esa última jornada recorriendo las pistas en que los últimos días mayor disfrute tuvimos, es decir la zona de la Laguna de las Yeguas, el Veleta, etc.
Hubo suerte con el tiempo, y el día amaneció soleado, aunque con algo de viento, por lo cual en las zonas altas, especialmente en la zona del Veleta y pistas altas de la Laguna, el viento generaba una corriente de nieve en polvo que parecía como que hubiese niebla. Al terminar la subida del telesilla incluso molestaba, pero una vez que iniciabas la bajada era una delicia porque la nieve estaba inmejorable.
Aprovechamos toda la mañana haciendo muchos
recorridos por Veleta, por la Trucha, por la Olímpica, etc. y asi hasta cerca de las 2 de la tarde, en que decidimos bajar un poco mas para ir a otras pistas.
Tras llegar a la antena, Fer hizo una bajada por la pista negra que está alli y que ya el día anterior habíamos probado. Mientras tanto, yo bajé al pié de la pista para
grabarle, y pude tomar imágenes de su descenso. Hizo una segunda bajada, dejando a un lado la zona de bañeras que estaba más complicada y posteriormente volvimos hacia abajo, para acercarnos a las pistas que terminan en El Rio.
Y ya cerca de la hora en que deberíamos regresar al hotel para dar por terminada la
jornada, nos dirigimos a Neveros. Yo me había quedado el día anterior con ganas de hacer una bajada por alli, repitiendo mi experiencia de muchos años atrás. Pero con la ventaja ahora de estar un buen día, de tener la nieve en excelentes condiciones, y de cerrar asi una
excelente semana.
Y tras algunas dudas, finalmente me decidí a acompañar a Fer en el descenso. Mientras él hacía el descenso de la primera parte, yo me quedé arriba, esperando a ver su bajada y para que él, desde la mitad de la pista, pudiese grabar mi descenso, como asi hizo.
Ya llegados a la mitad, hicimos la opción inversa: mientras yo bajaba él se quedó a la espera, y cuando yo terminé de bajar, ya desde la pista de El Rio, pude grabar en video su descenso.
Y desde allí hicimos el recorrido final para terminar la jornada y la semana, antes de llegar al hotel a recoger las cosas, unirnos a Rafa y dirigirnos a Granada donde habíamos de pasar la noche para a la mañana siguiente tomar el avión de regreso a casa.
Ya en Granada, pedimos a un taxista que nos llevase a algún lugar donde poder hacer una cena cómoda y que tuviese interés. Lo cierto es que acertó y nos dirigió a un mesón muy típico, en el que no había guiris sino gente de Granada y en el que disfrutamos de platos locales, completando una excelente cena.
El regreso, con un par de horas de espera en Barajas,
se hizo fácil porque pudimos volver a utilizar la sala Vip de Aena. Y ya en A Coruña, me encontré a Ipi esperándome en el aeropuerto, dando asi por terminada esta Semana de Esquí que me deja cubiertas las expectativas de nieve para toda la
temporada. Hasta el próximo año, teniendo en cuenta de que mis iniciales temores por el estado de mi rodilla no me han impedido esquiar y he podido disfrutar de unas jornadas espléndidas, únicamente empañadas por el accidente de Rafa y porque él no haya podido hacerlo como Fer y como yo.